Señales de un proceso sólido, basado en la vocación de ir por más.
¿Qué hice en mi infancia, hasta llegar a los 17 años? Bueno, podría estar hasta mañana, así que solo describiré una de tantas acciones. Aparte de empezar a mirar golf a los 8 años (y vivir delante de la programación de todos los canales deportivos), apreciaba una serie de animé (para algún trasnochado, son los dibujitos animados de procedencia japonesa) que mostraba a Sakura Kinomoto, volviendo a recolectar las famosas «Cartas Clow» para evitar una catástrofe mundial. Era una de las pocas cosas que me hacía salir de mi obnubilación por las variables descriptas. Cinco de la tarde y ya estaba preparado, con mi cappuccino, para poner Canal 7 y vivir una hora de pura acción, generada por una chica que descubría sus curiosos poderes mágicos y los complementaba a una frescura típica de una familia común y corriente. Me hubiera encantado que ese pequeño mundo surrealista se hiciera realidad.
Pasaron 12 años desde ese momento. Etapa universitaria, pérdida de pelo y muchas otras cosas más. No interesan, en esta ocasión. Lo que sí les puedo decir es que mis éxitos (y mis fracasos. No hay que tenerle miedo a la palabra) dependieron, en gran medida, de la capacidad aventurera con la cual enfrentaba el día a día. Cuando creo en lo que puedo ser capaz de hacer y me valoro por dónde estoy, llego a lugares en los que nunca me hubiera imaginado. Y esta «receta» la veo reflejada en nuestra protagonista en cuestión.
Tengo el honor de presentarles a una chica que ama lo que hace, transmitiéndolo dentro de un campo de golf. A una chica que no descuida sus obligaciones, en pos de llegar a lo más alto posible, en nuestro deporte. Pia Babnik nació en la pintoresca ciudad eslovena de Ljubljana (capital del país), el 2 de enero del 2004. Sí, escuchó bien. Hasta ese 2 de enero, para que se den una idea, Annika Sörenstam contaba con más títulos (en el LPGA) que Tiger Woods (en el PGA Tour). A su vez, observábamos a la francesa Patricia Meunier-Lebouc ganar el viejo Kraft Nabisco Championship 2003: su único major y el último título ganado en el LPGA. Lorena Ochoa, a su vez, era novata del año 2003 y Phil Mickelson todavía no había ganado su primer torneo grande. Todo eso estaba transcurriendo en el planeta, mientras nuestra joven golfista daba sus primeros pasos de vida. El golf entraba en el proceso de la globalización. Un proceso que chocaría con el camino de la oriunda del país balcánico.
No voy a dar ningún adelanto sobre lo que hemos hablado el sábado posterior a su experiencia arábiga. Muy rara vez hemos utilizado este recurso. Ahora, vuelvo a recurrir a este mecanismo porque creo que la mejor manera de entender lo que ha logrado nuestra querida Pia Babnik hasta ahora. Mi querido lector, le sugiero que cierre sus ojos, recuerde cuáles eran sus metas (a los 17 años) y cómo las afrontaba. Mientras piensa, le doy unos minutos para que se ponga cómodo.
– Pia, acaba de llegar la segunda victoria de tu carrera, con un final cargado de tensión. Jugando un hoyo final al borde del abismo (tu pelota, en la salida, casi termina en el agua), conseguiste la cuarta edición del Aramco Team Series (en la modalidad individual, disputada en la ciudad saudí de Jeddah). ¿Cuáles eran tus sensaciones, en esos momentos de definición? ¿Cómo enfrentás este final de la Race To Costa del Sol?
– En ese hoyo 18, sabía que si hacía un birdie podía ganar. A su vez, con un par, sabía que aún podía ganar en un playoff. Por lo tanto, no hubo demasiada presión para ese putt.
En cuanto a la Race to Costa del Sol, estoy contenta con mi actual segundo lugar. Además, deseo poder terminar en el segundo o el tercer lugar, al finalizar esta competencia. Si no se puede dar así, ya que otras jugadoras lo harán mejor, no hay ningún problema. Estaré muy contenta si juego bien.

– Pia, si no hubiera dicho tu edad y tomara como «medida» la edición anterior del Aramco Team Series, (para los que no lo sepan, terminaste T-4, en la competencia individual de Nueva York, detrás de Charley Hull, Nelly Korda y Danielle Kang: 3 referencias del golf femenino actual), pareciera que transitaste muchas temporadas en el LET. Sin embargo, como dijimos anteriormente, solo tienes 17 años y es tu segunda temporada en el circuito. ¿Qué enseñanzas obtuviste en esta competencia y qué te ha impactado allí? ¿Pudiste tener conversaciones con las golfistas nombradas?
– La edición de Nueva York me mostró que puedo competir «de igual a igual» contra las mejores jugadoras del mundo. Esto también lo encontré en el Scottish Open, el AIG Women’s Open, el The Amundi Evian Championship y en los Juegos Olímpicos. Si tengo mi mejor semana, le puedo ganar a cualquiera.

– Has mencionado a tu participación en los Juegos Olímpicos de Tokio. Para quienes no saben, fuiste parte de la delegación eslovena, hace algunos meses atrás (terminaste T-34). Además, fuiste la única golfista que representó a su país. ¿Cómo viviste estos días, sabiendo lo que significa tratar de llevar lo más alto posible a tu bandera? ¿Cómo hiciste para aislarte de todas las repercusiones que se iban generando?
– Mi participación en los Juegos Olímpicos ha sido una gran experiencia. Realmente he disfrutado la atmósfera entre todos los deportistas. Y no sentí ningún tipo de presión. Al contrario, tuve una motivación adicional y deseo jugar nuevamente este evento especial.
– Al hablar de Eslovenia, podríamos decir que vos sos una de las que está fomentando la cultura golfística, junto a Katja Pogacar y Anna Belac. ¿En algún momento han hablado de esta situación? Para vos, ¿qué aspectos han evolucionado (y qué aspectos faltan mejorar) en el golf esloveno?
– En cuanto a lo que me estás preguntando, lo que te puedo decir es que, en Eslovenia (con los resultados de mis 2 compatriotas y mis buenos resultados), hicimos el golf más popular y más presente en las redes sociales.
– Toda historia tiene sus inicios. En tu caso, la situación arrancó cuando tenías 3 años. Nuestro deporte, en tu vida, ha convivido con el badminton y el tenis. ¿Recordás el momento en el que decidiste continuar por el camino del golf? En todo esto, ¿Cuánto tuvo que ver la inspiración por Tiger Woods?
– Aun habiendo practicado otros deportes, que incluso me gustan mucho, nunca hubo dudas de mi prioridad: el golf.

– En tu carrera, se dio todo muy rápido. Tu primera competencia junior fue a los 4 años. A su vez, conseguiste tu primer birdie en el Campeonato Nacional de Menores, a los 8 años (allí, terminaste tercera). A los 12, ya estabas jugando un torneo en el LET Access (segunda categoría europea), en donde… ¡pasaste el corte! En paralelo a esto, lógicamente, nunca dejaste de lado tus actividades escolares. En referencia a los niños que puedan estar en una etapa similar a la descripta, nos gustaría que describas cómo hacías para llevar en simultáneo ambas cosas. ¿Cuánto tuviste que sacrificar (en relación a cumpleaños de 15, salidas con amigos y otros momentos con seres queridos) para ir transitando todos estos momentos?
– Amo mucho el golf. Es tanto ese amor que no extraño otras actividades. De hecho, mis papás quieren que termine la escuela secundaria, antes de dedicarle todo mi tiempo al golf. Igualmente me gusta la escuela y quiero a mis compañeras, haciendo que no me sea difícil estudiar.
– Tuviste una carrera amateur brillante. Al pasar, nombro tu triunfo en el Trnovo Masters 2018 (hecho en tu país), realizando una ronda de 58 golpes. A su vez, podríamos hablar de tus participaciones en las competencias mundiales por equipos. Sin embargo, tu victoria más destacada fue en el The Girls Amateur Championship 2019, disputando en Panmure Golf Club escocés: uno de los clubes más antiguos del mundo. Te llevaste el evento con absoluta categoría, con un golf digno de imitar. ¿Cuáles son tus mejores recuerdos de esa semana? Este triunfo, ¿cuánto tuvo que ver con tu rápido salto al profesionalismo?
– Sí, el The Girls Amateur Championship 2019 fue una de mis grandes victorias. Me sentí bien, pero, en ese año 2019, tuve otros grandes triunfos. Por lo tanto, buscaba testearme con algunas profesionales.
En cuanto al rápido salto al profesionalismo, luego de que obtuve mi tarjeta en la Q-School, no dudé ni un segundo en convertirme en profesional.
– En esa Q-School del Ladies European Tour, fuiste la más joven en obtener la tarjeta del circuito. Allí, tuviste que lidiar con algunos problemas físicos. ¿Cómo hiciste para que tu mente no se desviara del objetivo, sabiendo lo que estaba en juego?
– Como te había mencionado en la pregunta anterior, estuve muy contenta al haber terminado lo suficientemente arriba en el marcador, obteniendo la tarjeta completa. Además, quedé sorprendida para bien con las buenas fisioterapeutas que las mujeres tienen en el tour. Una de ellas me ayudó con mis cansados músculos, haciendo que pueda jugar esta competencia.
– Surgió la pausa por el COVID-19 y el Augusta National Women’s Amateur se postergó por un año. En el medio, como habíamos mencionado anteriormente, decidiste hacerte profesional, perdiendo la posibilidad de disputar el evento. ¿Te quedó como una cuenta pendiente? ¿Qué cosas pudiste tomar de esos momentos de reflexión, en donde no había competencia, conociendo tu decisión de ir por más y entrar a la nueva etapa nombrada?
– Por el COVID-19 (y todo lo relacionado al tema), fue incluso mejor convertirme en profesional, ya que la mayoría de los torneos para aficionados se cancelaron. Así pude tener más cantidad de competiciones para disputar.
– Dijimos que, en tu carrera, todo había sido muy rápido. Bueno, para quienes no saben, ya contás con tu primera victoria en el circuito. En el Jabra Ladies Open 2021 (torneo que se juega en la sede del Evian Championship. La victoria te permitió disputar este major: el primero en el que clasificaste), venciste a la inglesa Annabel Dimmock, en el primer hoyo del desempate. A su vez, tu padre fue tu caddie. ¿Se dio todo tal cual lo soñaste? ¿Cómo fueron los días posteriores a este logro, sabiendo lo que habías alcanzado?
– Sí, mi victoria vino muy rápido en mi carrera. Ahora, el punto principal es que, en ese momento, logré clasificarme para los Juegos Olímpicos. No obstante, quiero destacar más a mi segunda victoria, que llegó recientemente (como hablamos al principio). La misma fue incluso más importante, ya que me doy cuenta de que realmente puedo ser N°1 en el futuro.

– Para terminar, agradeciéndote por tu enorme generosidad, te propongo un juego. Supongamos que te enterás que podés ver tu futuro, en 10 años. ¿Cómo te gustaría que sea? ¿En el mismo, cuántas participaciones en la Solheim Cup y majors ganados quisieras que haya?
– Como escribiste, busco estar en la parte más alta del golf femenino y ser una jugadora habitual de la Solheim Cup.
No creo que haya dejado de soñar a los 17 años, mi querido lector. De hecho, nunca hay que dejar de soñar. Y esto no lo digo como algo idílico. Creer en lo que uno busca es una acción clave para el cumplimiento de los objetivos. Quédese tranquilo: no peca de soberbio. Todo lo contrario. Quererse también es decirse «voy por acá», intentarlo y comprobarlo. Anímese. Pia Babnik viene demostrando que esto es posible, confirmando que la edad es solo un número. Fíjense que no necesita declaraciones estridentes. Todo lo contrario. Ella marca un conocido patrón (visto en muchos de los entrevistados que tuvimos), reflejando un sistema de planificación cercano a la perfección. Además, con su espíritu aventurero, trabaja con una proactividad que le otorga más dividendos que costos. Se anima y va. Dentro del campo de golf, no tiene vergüenza. No se paraliza. Con un swing cercano a «la vieja escuela» (en mi humilde opinión, uno de los mejores del circuito), marca un dominio que cada vez es más visto de cerca.
El jueves, arranca el torneo final de una nueva temporada del Ladies European Tour. Obviamente que parte de nuestros deseos estarán con Maggie Simmermacher y la posibilidad de que llegue a las 5 mejores del año (para poder disputar la última etapa de la escuela clasificatoria del LPGA). Ahora, no deje de lado a alguien que ya es parte principal del tour y forma el futuro cercano de nuestro deporte. Entre todas las cartas que circulan en este mundo, ella es alguien a tener en cuenta. Pia Babnik va en camino a ser LA CARTA DE ORO del golf femenino. Nos está dando algunos indicios.

Matías Miguel Torge
Handicap 54
Aclaración: las fotos fueron tomadas de la página de Flickr del Ladies European Tour.
PD: si le gustaría ayudarnos a seguir creciendo como medio, tiene la posibilidad de realizar donaciones, sin ningún tipo de compromiso y haciendo click sobre la imagen que estará a continuación.

5 comentarios sobre “PIA BABNIK: LA CARTA DE ORO”