HONESTIDAD Y GRAN COMPAÑERISMO

La posibilidad de hablar con el querido Santi Tarrío y… Jon Rahm: 2 personas que entienden estos valores, al 100%.

Bueno, en el torneo lideran 2 veteranos de mil batallas, en esta gira. El inglés Paul Waring y el escocés Stephen Gallacher, quienes lideran con -12. No obstante, nos dimos el lujo de ver a un Santiago Tarrío (quien salió con el bombardero danés Niklas Norgaard Moller y el italiano Filippo Celli, a quien también hay que seguir de cerca) que está a 7 de la punta (T-29) e hizo una gran vuelta, inspirada en Seve Ballesteros. ¿No me creen? Bueno, en el hoyo 5, llegó al bunker del green. ¿De qué manera? Estaba literalmente pegado a un árbol, tenía una hendija del tamaño de un ojo y un ínfimo swing para trabajar. Fue un par antológico. Fue una ronda antológica. Bueno, mejor que lo cuente él.

Luchó hasta más no poder. En el 11, sintió que había tocado fondo. Consiguió el birdie, en el 12. Siguió insistiendo y salió airoso, con 68 golpes y a 2 de la punta. Jon Rahm está a dos del liderazgo. Y tiene ese fuego sagrado.

Muestra de una manera perfecta a sus imperfecciones. Es su manera de ser. Y esto lo demuestra tanto dentro como fuera del campo. Sabe convivir con eso y sigue adelante, sin importar que pase. El Jon Rahm que hizo ese dardo en el 16 (se los puedo asegurar que fue de otro planeta) es el mismo que hemos contado, viéndolo comer un gran sandwich de jamón. Es el mismo que está contento con la gente, diciendo que «la relación es muy buena» y que siempre esto ayuda.

«Si pudiera estar líder, con 7 golpes de ventaja, sería genial». Hasta se da el lujo de hacer esos chistes. Y por eso lo sigue la gente, con absoluto convencimiento. Se va adaptando a lo que le toque. Es que exactamente hizo lo mismo que ayer, cuando tuvo sus malas salidas, tanto en el hoyo 1 como en el 2. Jon Rahm es lo que es, por todo lo que estamos describiendo. Su categoría no se puede subestimar a nunca. Además, a todo esto, siempre está ubicado en tiempo y en espacio, te guste o no lo que piense.

Tuvimos el honor de poderle preguntar, en conferencia de prensa. Y creíamos absolutamente necesario el hecho de hablar sobre la reciente noticia de Sergio García. Como dijimos en el artículo anterior, el ex ganador del Masters 2017 no estará en Mallorca y, por ende, no podrá jugar la Ryder Cup (necesitaba disputar 4 torneos, como mínimo. A su vez, debía jugar uno de estos en su país. Pasando Mallorca, esto no se puede cumplir). Esto fue lo que nos dijo Jon Rahm:

«¿Qué quieres que te diga? Es una situación complicada para Sergio. Lo he dicho muchas veces y te lo diré otra vez. Yo creo que la Copa Ryder no es PGA Tour/DP World Tour VS. LIV Golf. La Ryder Cup reúne a los mejores de Europa contra los mejores de Estados Unidos. Y para mí, la Copa Ryder está por encima de todo. Ojalá pudiese jugar. No pinta bien. Entiendo que decida no jugar. La última vez que jugó un torneo del DP World Tour, no se lo recibió muy bien. Y aunque me imagino que en Mallorca sería diferente, de cara al público, entiendo que no se haya apuntado».

Al final, Rahm decía que «a Sergio le quedan días». Y también decía «que se imaginaba que, si el viernes decide ir, no lo dejarían de lado, teniéndolo claro». Bueno, tenemos entendido que esto no podrá ser, por una sencilla razón de reglas. Por otro lado, el último torneo de García fue el BMW PGA Championship… en Wentworth. Sí, el mismo torneo en el que García se tomó el avión para abandonar el torneo, por un partido de futbol americano universitario. Pero bueno, ese es otro tema que dará que hablar.

Al final, hoy se trató de HONESTIDAD Y GRAN COMPAÑERISMO. Y esto lo decimos, a pesar de que quedan 36 hoyos por delante.